miércoles, 19 de octubre de 2011

Capitulo 47 (y final)





Ese beso de David y Salva ha dejado perplejos a todos los presentes. En especial a Yoli y a Álvaro.
--¡Bravo, felicidades por los novios¡ ¡¡qué bonita pareja¡ --dice Álvaro aplaudiendo burlón.
Yoli agarra del brazo a David:
--¡Tú estás tonto¡ ¿qué estás haciendo con Fer 2? ¿¡¡es que te quieres volver a equivocar?¡
--¡Déjame en paz¡
David se muestra muy agresivo. Va a la clase al lado de Salva. No le hace caso pero le toma de la mano y se sienta con él. Rachid y David se miran de reojo con mucho amor pero con mucho dolor. Yoli se sienta al lado de Rachid.
--Salva sólo quiere sexo, David no le interesa y a David no le interesa Salva, tú no te preocupes. Yo hablaré con David y…
Rachid no la deja seguir:
--llévatelo después de clase, déjame a solas con Salva.
--No te vayas a pelear con Salva, es un pobre infeliz.
Rachid sonríe travieso:
--No, voy a jugar al mismo juego que David. ¿tienes un condón?
--¿qué vas a hacer? --pregunta incrédula y tosiendo.
--¿llevas?
Yoli saca uno, se lo da escondiéndolo mientras el profesor da la clase. Rachid se lo guarda.
--¿qué pretendes hacer? No vayas a complicar las cosas.
--David comenzó –dice travieso.
Yoli se queda intrigada pero Rachid no le da más explicaciones. A David le duele que Rachid no lo vuelva a mirar pero piensa que es porque ha logrado alejarlo de su vida y, aunque es lo que quería, le duele mucho. No soporta estar al lado de Salva, tener que acostarse con él pero confía en que Rachid haya entendido y no tener que volver a hacerlo.

Después de clase, Yoli se acerca a David, a éste le va perfecto que Yoli se lo quiera llevar. No le dice nada a Salva y se va con Yoli. Es la mejor excusa para estar lejos tanto de Rachid como de Salva. David mira a Rachid pero Rachid lo ignora. A David le duele pero no dice nada.
--Lo has perdido, por tonto –dice Yoli.
--Yo lo he dejado. Tengo novio –dice David con lágrimas en los ojos.
--Eres idiota…
Yoli y David se van alejando del aula. Rachid se acerca a Salva simpático.
--te puedo pedir un favor?
Salva se muestra nervioso. Rachid le guiña el ojo y pícaro:
--¿me acompañas al lavabo? te quiero enseñar una cosa. Te va a gustar mucho.
Salva traga saliva.
--¿de qué hablas?
--Ven, te gustará.
Rachid es muy coqueto y Salva no se puede resistir.
--Si me vas a golpear grito… --dice asustado mientras entra en el lavabo.
Rachid le enseña el preservativo:
--quiero que me comas la verga y si me prometes que nunca vas a volver a estar con David chingo contigo siempre que quieras.
Salva no lo duda. No entiende que se traen David y Rachid con él pero siempre soñó con hacerlo con todos los guapos de su alrededor y acostarse con un árabe es algo que le da mucho morbo. Disfruta mucho chupando la verga de Rachid. Cuando ya está gorda, Rachid se cubre y se introduce en Salva que con los pantalones y los bóxers hasta las rodillas y apoyado en el wáter goza como loco. Es un polvo rápido. Frío pero a Salva ya le va bien. David los ve salir del lavabo. Ambos se están subiendo la cremallera. Salva tiene una cara que no puede ocultar lo que ha pasado. David no entiende nada.
--¿qué es esto?
Rachid agarra la mano a Salva dice:
--Me he acostado con tu novio, si sigues con él va a ser llevando cuernos porque pienso acostarme siempre que yo quiera y no creo que éste me diga que no.
David siente una gran angustia. Rabia. Le duele que Rachid se haya acostado con Salva porque no sabe bien si lo ha hecho por vicio o para molestarlo a él, además Salva era la única manera que se le ocurría de alejar a Rachid de su vida y le duele mucho que el árabe se haya entrometido en su plan. Lleno de rabia, David le dice:
--¡te odio¡ ¿porqué no me dejas en paz? ¡no te quiero volver a ver nunca más¡ ¡quiero que te vayas del apartamento de mi padre¡ ¡¡me da igual si te quedas en la calle, ¡largo¡
A Rachid le duele mucho las palabras de David, Salva tiene miedo de salir golpeado y huye. Le gustaría pensar que se pelean por él pero sabe que a ninguno de los dos les interesa él. Ya ha obtenido lo único que esos dos y no se quiere meter en una pareja.

Rachid y David frente a frente. David le demuestra odio, Rachid está dolido pero lo ama.
--Yo me voy del apartamento pero tú nunca podrás olvidar lo mucho que me amas.
David no soporta escuchar a Rachid hablarle de un amor por el que supuestamente murió un inocente.
--¡que te calles¡
--¡Yo puedo callarme, tú te puedes acostar con todos los chicos que quieras pero me amas, me amas a mi¡
Rachid está dispuesto a luchar con todas sus armas por David y David siente una gran bronca hacia él mismo. La culpa por sentirse responsable de una muerte lo está consumiendo. Lleno de ira por ese amor que no puede matar y quisiera, se lanza sobre Rachid y comienza a golpearlo. Caen al suelo. David golpea a Rachid con saña.
--¡a ver si te convences de una puta vez que ya no quiero nada contigo¡ --dice mientras lo golpea llorando.
Rachid llora pero no se defiende, Yoli desesperada pide ayuda. Álvaro celebra el acontecimiento. Ver a esos dos guapos de esa manera le pone cachondo y además la ruptura definitiva de Rachid y David es algo que quiere celebrar. Llama a Jon. Sale del instituto, cruza. Va mirando hacia atrás para ver qué ocurre, mientras habla con Jon. No se ve a la ex pareja pero sí el revuelo que la pelea causa en la gente y eso lo hace sonreír. La sonrisa se le borra. Un camión sale de la esquina, Álvaro no lo ve y el camión lo ve cuando ya no puede frenar y la pasa por encima. A todos se les para la respiración. David y Rachid quedan congelados cuando se dan cuenta que Álvaro ha muerto.

Esa tarde, Álvaro es velado en la misma funeraria del padre de Jon que está destrozado. Jon llora su muerte. Estaba hablando con él en el momento de su muerte, sabe que murió por la euforia de la ruptura de Rachid y David. No sabe si debe seguir manteniendo su mentira o decir la verdad.




Al día siguiente se celebra el funeral en el que va toda la clase. Rachid y David se sorprenden al encontrarse.
--No esperaba verte –Rachid.
--Yo tampoco.
--Álvaro nos quiso hacer mucho daño pero no se merecía una muerte así.
--Además no fue él quien nos separó --David.
David y Rachid se miran con mucha tristeza. Les duele mucho estar separados. Hay una gran distancia entre ellos y a ambos les duele.
--voy a dejar el apartamento, me mudo a una pensión --Rachid.
--Te puedes quedar. Perdón por lo que pasó ayer.
--Se me cae la casa encima, sin ti no me interesa.
Se hace un silencio. Ninguno de los dos sabe qué decirse, es mucho el dolor que sienten. Jon llega, se le ve muy triste.
--¿qué haces aquí? –le pregunta David sorprendido.
Jon ya no quiere callar más:
--me alegro veros juntos, no quiero seguir mintiendo. Ni tengo sida ni Fer está muerto.
--¿de qué mierda hablas? –David.
Jon está muy triste pero no le ve caso seguir mintiendo:
--Todo fue idea de Álvaro, no tengo Sida. Me lo inventé y Fer está en su pueblo. Bien, todo fue una trampa.
Rachid se queda al lado de David que no puede creer que todo el dolor que ha sentido es en vano.
--¡Fer no me haría algo así¡
--Fer no te quiere, se acostó conmigo y con Álvaro e hizo lo que le pidió Álvaro, él fingió su propio muerte. Está vivo, puedes comprobarlo –Jon.
David se lleva las manos a la cabeza:
--¿¡dónde está?¿dónde?
Jon saca su móvil:
--¿sabes su número?
David marca nervioso. La voz de Fer suena clara.
--dime Jon.
David es puro odio:
--¡me cago en tus muertos, hijo de puta¡ ¡¡cómo te vea te voy a matar¡ ¡¡cabrón¡
Fer le cuelga. Está asustado. No le importa David, sólo espera que no sepa dónde está. David se quiere lanzar sobre Jon pero Rachid lo agarra.
--déjalo en paz. No tiene caso…
David está enloquecido. Da patadas.
--Vete –dice Rachid a Jon.
Jon se va muy triste. David está furioso y Rachid lo abraza.
--¡hemos roto por nada, ese maldito se ha cargado una historia de amor¡ ¡¡le tengo que romper la cara¡
Rachid le sonríe. Lo tiene sujeto para que no vaya tras de Jon. Su sonrisa calma a David.
--Yo te amo como siempre --Rachid.
Rachid suelta a David y David no dice nada, se queda hechizado por la sonrisa de Rachid. Rachid le pone las manos en las mejillas:
--No tienes peligro de contagio del sida, Fer no está muerto. Tenemos el apartamento, podemos ser felices --le dice con emoción y alegría.
David mira a Rachid con lágrimas en los ojos, siente mucho dolor, mucha rabia contra él mismo, No entiende porque no le han dejado ser feliz con Rachid.
--¡me acosté con Salva para molestarte¡
--y yo, no tenemos que pensar en el pasado --Rachid sonriente.
David se lleva las manos a la cabeza, empieza a dar patadas en la pared pero Rachid lo abraza por la espalda.
--te amo, nada me haría más feliz que quisieras olvidar todo lo que ha pasado en mis brazos.
David lo mira lloroso.
--¿podrías olvidar todo lo que te he hecho?
Rachid le sonríe y muy dulce le dice:
--No has hecho nada más que amarme, por favor. Vuelve a casa conmigo, tenemos toda la vida para ser felices.
David abraza a Rachid con desesperación, quisiera poder borrar todo lo que ha pasado en los últimos días.
--¡Te amo, te amo tanto¡
Los dos se abrazan con desesperación. David y Rachid vuelven a su apartamento, se desnudan, se besan, se acarician. Están juntos y ya no les importa nada, ni pasado, ni futuro. Sólo presente. Ellos dos. Hacen el amor con lágrimas en los ojos, lágrimas de felicidad. Se funden el uno en el otro. No pueden creer que al fin la pesadilla haya acabado, que nada entorpezca su amor, que se tengan el uno al otro y ahora están seguros que sí va a ser para siempre, que nadie va a impedir que sean felices. Son y serán un solo cuerpo.
Fin.


















lunes, 17 de octubre de 2011

Capitulo 46


David llega a su casa sin ganas. Lo espera Yoli. Rachid estaba demasiado nervioso y no ha podido esperar, ha preferido ir al apartamento con la esperanza que David vaya hacía allá. Yoli ve a David tan afligido que no le dice nada, sólo lo abraza con fuerza y le da un beso. David llora en sus brazos. En el momento en el que David ve que Yoli va a hablar, David le dice entre lágrimas:
--No me digas nada, quiero estar solo.
--Tú no tienes la culpa de lo de Fer, puedes ir con la cabeza bien alta.
David siente cómo se le hubiera atravesado con un puñal y le hubieran arrancado el alma.
--Sabes que no, es cómo si lo hubiera matado yo.
David ya no permite que Yoli le diga nada y se retira a su casa.
--¡Llámame, no pases esto solo¡
David entra en el edificio y Yoli se queda preocupada. Rachid está solo en el apartamento. Llama a Yoli para saber de David.
--sí, está en su casa pero es mejor que no lo busques.
A Rachid le duele que David no lo quiera ver y esas paredes en las que tan feliz ha sido ahora se le caen encima.

En ese mismo instante, Jon y Álvaro están llevando a Fer al cielo. Están los tres desnudos. Fer pensó que no podría gozar más de lo que ha gozado David y ahora se da cuenta que estaba equivocado. Álvaro se la chupa a Jon, Fer a Álvaro y Jon a Fer. Álvaro y Fer se van moviendo, Jon se la chupa a Alvaro, Alvaro se la chupa a Fer, y Fer a Jon.








David se tumba en su cama. Llora. Rachid está solo en el apartamento. Llora. David y Rachid se aman y les duele mucho lo que está pasando. Para David es definitivo, Rachid no piensa aceptarlo porque le duele mucho estar sin David. David está decidido a cualquier cosa con tal de alejar a Rachid de su vida porque le duele mucho verle, le duele mucho rechazarlo, quiere que se desengañe, que lo deje solo con su dolor. Mientras David la muerte de Fer, éste grita de placer. Jon debajo sentado, Álvaro sentado sobre él y Fer sentado sobre Álvaro. Álvaro es el primero en venirse, así que se aparta para que Fer pueda gozar de la verga de Jon. Fer disfruta de todas las formas posibles. Le gusta estar entre esos dos guapos desnudos.
--lo podríamos volver a repetir –dice Fer.
--¡No, yo no, solo una vez¡ --se queja Jon.
Álvaro se viste, Jon se monta en su silla desnudo.
--es mejor que te vayas a ese pueblucho y que cumplas con lo que has prometido --Álvaro.
Fer se queda en la cama.
--si no repetimos esto pues diré la verdad.
Pese a que está en una silla de ruedas, Jon demuestra que se sabe defender. Se pega a la cama en su silla, agarra del cuello a Fer y le dice con desprecio:
--¡si hablas vas a la cárcel, no podrás demostrar que no has planeado tu falsa muerte. Así que por tu bien es mejor que te largues¡
A Fer le excita ese guapo en silla de ruedas todo desnudo pero también le da miedo. Se viste y se van con prisas. Álvaro está ya vestido. Está feliz por lo cómo han salido las cosas.
--Ahora es cuestión de horas que esa parejita se rompa si es que no se ha roto ya…
Y Álvaro se jacta por haber roto esa relación que tanto le molestaba. Jon salta de su silla a la cama. Sigue desnudo. Mira con deseo y amor a Álvaro.
--No te acabes de vestir, quédate conmigo. En cuando uno de los dos se recupere quiero el premio que me merezco por el asco que he pasado al acostarme con esa cosa.
--No, ya has tenido premio. Te has acostado conmigo --Álvaro pícaro.
Desde la cama, Jon mira molesto a Álvaro:
--¡eso no me vale, he hecho mucho por ti, no me vale con unos simples polvos¡
Álvaro se sube la cremallera. Mira divertido a Jon y dice:
--pues no te pienso dar más.
Jon se enfurece.
--¡yo no soy ese imbécil, yo si no me cumples sí cuento todo¡
A Álvaro le gusta jugar con la gente, que hagan lo que él quiera. Es por eso que le da rabia Rachid, porque él no se prestó a hacer su voluntad.
--No vas a contar nada, y lo sabes. Esperarás paciente a que yo te quiera buscar –dice Álvaro burlón.
Álvaro se va contento sin ninguna intención de volver a acostarse con Jon pero convencido que Jon no le va a fallar.




Comienza un nuevo día, Rachid y David van a clase por separado. Rachid tiene la esperanza de hablar con David y David no quiere que Rachid se acerque a él, confía en que con lo que ha pensando Rachid no quiera saber de él. Rachid va a buscar a David a su casa. Lo espera abajo.
--¡qué pesao, que ya está¡ ¡¡que se acabó¡ --David.
David quiere ofender a Rachid, decirlo que nunca lo amó pero no puede. David corre para huir de Rachid. Rachid corre para seguirlo.
--¡Me vas a escuchar, si no me amaras te dejaría pero sé que me amas¡ ¡¡no tiene sentido lo que haces¡¡
Están ya llegando al instituto, David no soporta más que Rachid lo persiga. Se para bruscamente y lo mira.
--¡da igual si te amo o no¡ ¡¡no puedo ni quiero estar contigo, ahora estoy con otro, me acosté con otro, tú ya eres pasado¡
Y David habla con mucho dolor. Rachid es lo mejor que le ha pasado y le duele renunciar a él pero siente que es lo que debe hacer, que no puede construir su felicidad sobre la muerte de alguien.
--No te creo, ¿con quién se supone que te has acostado?
Salva está en la puerta del instituto esperando al que se supone es su novio. Salva está algo nervioso, no puede creer que David se haya acostado con él y quiera volver a hacerlo. David señala a Salva.
--él, me acosté con Salva.
Rachid se le ríe.
--¡quien te va a creer eso?¡ ¡¡tú no lo suportas¡
--Es un pobre infeliz como Fer, es lo único que puedo hacer. Salva y yo somos novios, espero que lo aceptes y que me dejes en paz.
David hacia Salva, Rachid lo sigue.
--¡eso no es cierto, tú no puedes estar con ese¡ ¡¡tú me amas a mi¡
Salva tiembla de miedo y de deseo al estar frente a esos dos chicos tan guapos. Deseo porque los dos son guapos y miedo por el desprecio con el que ambos lo miran. Ambos lo desprecian por igual y parece que le van a golpear. David no dice nada, responde a Rachid besando a Salva con un beso salvaje que casi hace que Salva se desmaye. Rachid mira todo con lágrimas en los ojos. Sabe que David está haciendo eso por culpa, para alejarlo de su vida pero duele. Duele mucho y a David también le duele hacer daño a Rachid. Salva se queda conmocionado.

Capitulo 45




Suenan campañas de funeral, toda la escuela llora a Fer aunque nadie había tenía relación con él. David y Rachid aparecen cada uno por su lado. Quedan entre las últimas filas. Sorprende que no haya familiares de Fer. Los profesores son los que ocupan la primera fila.
--Yo hablé con la funeraria, parece que la familia no puede venir, dijeron que nos ocupásemos nosotros –dice Olimpia.
No hay nadie que oficie la ceremonia que es en una capilla de la funeraria. Van pasando los que quieran a decir unas palabras para despedir a Fer. Olimpia sigue comentando con los profesores que en le dijeron que así lo quiso la familia. Álvaro toma la palabra.
--La mejor manera de recordar a nuestro querido Fer es no olvidando que su suidicio fue anunciado. A mi me consta que muchas veces le dijo a David que se iba a matar por él. David y Rachid son los responsables de la muerte de Fer y no entiendo como han tenido cara de venir hasta aquí. Nunca debemos olvidar que son unos asesinos.
Y Álvaro mira fijamente a David, que está en las últimas filas, y dice:
--¡Fuera de aquí, asesino¡
Olimpia es la que para los gritos de asesino que los otros van lanzando tras Álvaro. Yoli no está en el sepelio. David no aguanta las miradas de odio y se acaba yendo. Rachid va tras él. Discuten en la puerta.
--¡David, no puedes irte así¡
Rachid trata de agarrar del brazo a David pero el chico no lo permite.
--¡Qué me olvides, que me dejes en paz¡ ¡¡que verte me hace recordar que hemos matado a Fer¡
--¡eso no lo vuelvas a repetir¡
David está desolado. No quiere que nadie lo vea, quiere esconderse y no tener que enfrentarse a las miradas acusadoras de sus compañeros pero Rachid no lo quiere dejar solo. Rachid trata de hablar con David pero éste se muestra violento.
--¡si te me vuelves a acercar te rompo la cara¡ ¡¡déjame en paz¡
David quisiera herir con palabras a Rachid, ofenderlo para que se olvide de él porque no quiere que estén juntos, siente que eso se lo debe a Fer pero lo ama demasiado para ofenderlo, para decir que nunca lo ama. Se conforma con lo que ha dicho y se va. Se va herido. Llora. Rachid se queda muy triste. Le han dolido las palabras de David pero no está dispuesto a renunciar a él, confía que con el pasar de los días David pueda olvidar todo el dolor que sienten y puedan volver a ser pareja. David entra en un bar. Pide una cerveza. Se la bebe de golpe y luego va al lavabo a lavarse la cara. Rachid no sabe qué hacer. No quiere tener problemas y decide volver a la casa para esperar a David pero en el camino llama a Yoli.
--¿sabes algo de David? Es que tuvimos un problema en el funeral de Fer y se fue solo.
--¡es que yo le dije que no fuera¡ ¡¡te cuelgo que le marco¡
Rachid va caminando y Yoli no tarda en llamarlo.
--¡este no me toma la llamada, ven a mi casa y hablamos. Así me quedó más tranquila¡
--Es que quiero ir a la casa por si él vuelve.
--¡qué va a volver¡ ¡¡mira yo lo voy a esperar a su casa¡ ¡¡seguro que va por allí¡
Rachid piensa que es poco posible que David vuelva al apartamento si no lo quiere ver así que va a buscarlo a casa de los padres.
--Si le ves no le digas que voy para allá –dice Rachid.


David está haciendo pis. Salva entra en el lavabo. No puede creer su suerte. David le gusta mucho y nunca ha logrado verle la verga porque David se la protege mucho. David está mal. Está haciendo pis y se encuentra separado. Salva confía que el dolor por la pena haga que David no le preocupe si le ve la verga. Salva se pone nervioso. David le gusta mucho, tiene su verga agarrada levemente y Salva (sí se gira) se la ve perfectamente.
--qué gozada¡ --piensa.
Tiene que girarse a posta y se ve descarado. Salva tiene miedo que David le diga algo porque siempre lo ha detestado pero le cuesta mucho renunciar a esa visión. Mira varias veces, está cachondo. Tantas miradas pone nervioso a David al que no le sale el pis. El que tampoco hace pis es Salva. Tenía ganas pero por la excitación se le ha pasado. Salva está encantado de lo que está viendo. Al fin la verga de David no es un secreto para él. Le han entrado ganas en el funeral pero ha preferido ir a un bar porque tenía la ilusión de encontrar algo que mereciera la pena pero no espera tanto.
--¡menuda joya tiene entre las piernas¡ --dice para sí.
David es muy guapo y no la tiene muy grande pero es el doble de la de Salva que francamente sí la tiene pequeña aunque ya no tanto porque le está creciendo. Salva está encantado de sumar una verga más. David se da por vencido. No ha hecho pis, se empieza a lavar las manos con la esperanza que Salva se vaya y pueda hacer pis. Salva se lava también las manos y muy lentamente. David pierde la paciencia. Lo mira con mala cara y dice:
--¡¿es que no me has visto la verga ya bastante?¡
David mira a Salva con tanto odio que el chico teme que lo golpee. David tiene mucha rabia dentro de él y va a descargarla en Salva pero el chico no sabe bien como. Lo agarra con violencia.
--¡Suéltame, voy a gritar¡ --Salva asustado.
David es muy violento.
--¡Que te calles, te voy a dar lo que estás llamando a gritos¡ ¡Dame una moneda¡
Salva está algo desconcertado.
--¡qué me des una moneda o te rompo la cara¡ --David.
Salva saca todo el dinero que lleva. En el mismo lavabo hay una máquina de preservativos. David saca uno. Salva no da crédito a lo que está pasando pero se deja dominar. Es un muñeco en las manos de David y eso es lo que quiere David. No dice nada pero igual tampoco podría porque David se lo lleva a uno de los wáters y le llena la boca con su verga. Salva siempre ha fantaseado con que se la chupaba a David pero nunca pensó que su sueño se haría realidad.

Álvaro sale del funeral. A lo lejos ve en un coche a Jon, está en la parte de atrás. Álvaro se pone nervioso y se acerca a él.
--¿qué haces aquí?
--Fer está en mi casa. Nos está esperando. No me apetece acostarme con él y quiero salir de esto rápido.
Álvaro se monta en el auto.
--vamos, rápido. No quiero que nos vean juntos.
--¿qué tal fue todo?
--como dijiste. Nadie sospecha de la falsa muerte de ese imbécil, tu padre se ha portado.
Jon sonríe con orgullo:
--te dije que mi viejo no nos iba a fallar.

En ese mismo instante, Salva está gritando por dentro. David le está clavando su lanza con violencia. Con rabia y Salva disfruta como una bestia. David es muy bruto con él. Lo está lastimando pero a Salva le basta con saber que se está acostando con el chico más guapo que ha visto en su vida. Hace unos días, Salva era virgen y ahora en cambio dos hombres lo han hecho gozar como nunca antes. Jon era un desconocido pero David era alguien a quien le tenía muchas ganas, alguien que jamás pensó que le haría sentir así. David se descarga en Salva al que deja conmocionado. Mientras se sube la ropa, David lo mira con dureza.
--¡yo te detesto, no quiero nada contigo pero si tienes claro que todo es de mentira y te haces pasar por mi novio pues chingaremos siempre que quieras¡
Esas palabras son un sueño para Salva que sólo tiene una respuesta:
--¡claro¡
Y David se va con la misma mirada rota con la que entró pero con menos rabia. Salva se sube la ropa con una sonrisa. Es el día más feliz de su vida.