Capítulo 31

Rachid va llorando a casa de David. David se angustia mucho al verlo. Va con una maleta. Acaricia sus golpes.
--que te pasó, cariño? –pregunta David.
Rachid solloza. Guarda en el bolsillo la foto que ha aparecido en su portal.
--Las han pegado en mi bloque, las han visto mis padres¡ ¡¡me han echado de casa, dicen que estoy muerto para ellos¡ ¡¡estoy solo¡
A David le impresiona mucho que su chico sufra de esa manera.
--el hijo de puta de Álvaro ¡ha sido él¡
--supongo.
--¡lo voy a matar¡
David está lleno de odio, está dispuesto a ir a casa de Álvaro y hacerle un escándalo. Rachid lo agarra.
--No es esto lo que quiero, lo que necesito es que me des un abrazo.
David lo abraza con fuerza. Lo acaricia, lo besa con tristeza. Se están amando con intensidad pero Rachid sufre por el rechazo de su padre, David por el dolor de su amado.
--Es que esto no se puede quedar así.
En brazos de David, Rachid se queda mucho más tranquilo.
--lo que quiere es que nos metamos en un lio, yo quiero ser feliz a tu lado…
Rachid lo ha perdido todo, sólo tiene a David y lo que quiere es disfrutar del amor de su chico sin preocuparse de nada más. David está lleno de rabia.
--¡pero esto no se puede quedar así, mañana todos sabrán que es marica¡
Rachid lo va acariciando, lo va calmando.
--no caigas en su juego, ya hoy lo dijiste y parece que le da igual, tampoco tenemos como probarlo.
--¡a sus padres a lo mejor no les hace tanta gracia, a su novia, si sembramos la duda…¡
Rachid calla a David con un beso.
--Pero es que yo quiero ser feliz, yo no quiere perder ni un segundo pensando en un imbécil, quiero estar todos los minutos que se pueda a su lado, disfrutando de ti.
Se miran, se sonríen enamorado.
--Te quiero tanto, te amo. Nunca sentí esto por nadie –susurra David.
--Yo también te amo.
Se hablan con amor, con sonrisa, con lágrimas y emoción y tristeza por la situación de Rachid.
--Estamos juntos y eso es lo que a mi me importa y parece que es lo que le jode, si él nos ve felices es la manera de lastimarlo…
--eres el mejor, por eso te quiero tanto.
Hay mucho amor entre esos dos jóvenes, se protegen uno a otro, se acarician. Se besan.
--me duele haber perdido a mis padres pero no me arrepiento de estar contigo.
A David le duele ver a Rachid triste. Lo acaricia, Se besan.
--dales tiempo, se les pasará.
--si nadie más se hubiera enterado no pasaría nada pero ahora… No me van a perdonar.
David acaricia las lágrimas de Rachid.
--Me duele mucho que estés pasando por esto por mi culpa.
--tú no tienes la culpa de nada, Álvaro me odia y no sé bien porque, es algo personal contra mi pero no quiero que él me estropee mi felicidad aunque duerma en la calle.
--En la calle no, tú te quedas aquí…
David va a meter la maleta de Rachid en la casa.
La madre se mete.
--¡ni hablar¡
David desafía a su madre:
--Rachid y yo vamos a vivir juntos…
-¡Aquí no me vas a meter este mo…¡
Tanto a Rachid como a David les duele el desprecio con el que la madre iba a decir la palabra moro pero se calla.
--Rachid es mi novio –dice David con orgullo.
--Hijo, aquí no se puede quedar.
David toma de la mano a Rachid.
--pues nos vamos…
--No seas loco, no empeores las cosas –dice Rachid.
La madre no hace mucho caso a su hijo, sabe que no tiene dónde quedarse. David deja la maleta de su chico en la casa.
--Luego venimos a buscarla.
David se ve muy animado, va tomado de la mano de Rachid. Juntos espera el ascensor.
--todo esto no es necesario, es mi problema.
David y Rachid frente a frente. David lo abraza.
--No, es problema de los dos. Somos una pareja.
A Rachid le emociona que David lo apoye pero no cree que pueda hacer nada.
--si nos quedamos en la calle nos quedamos en la calle los dos pero no te preocupes, mi padre nos apoyará.
David y Rachid se besan. Se acarician. Se dicen muchas veces lo mucho que se quieren. Entran en el ascensor. Se miran con mucho amor.
--tengo mucha suerte al tener al mejor novio del mundo –dice Rachid.
Rachid está feliz de estar con David pero sufre por su situación. Unen sus frentes. Se aman y David está dispuesto a todo

David y Rachid van al despacho de su padre. El hombre interrumpe su trabajo. Sabe que su hijo le va a pedir algo. Rachid se mantiene un poco atrás a pesar que David le tiene tomado de la mano.
--¿qué hiciste ahora? –le reclama el padre.
--Yo sólo quiero estar con Rachid, no tengo la culpa de que no nos dejen en paz.
--¿qué quieres?
--Un hijo de puta le pasó a los padres de Rachid fotos del video dónde están juntos. Lo han echado de casa.
Rachid tiene la cabeza agachada. Sus golpes indican que no miente. El padre de David lo mira con compasión.
--Tu madre no va a querer que viva con nosotros.
--ya, por eso he pensando una solución. Es muy peligroso –dice con algo de burla—eso que tengas un apartamento para verte con tu amante. Por eso quiero que nos dejes ese apartamento para vivir con Rachid.
--¡Ni hablar¡
--Venga papá, yo permite que le pongas los cuernos a mamá. Tampoco te cuesta tanto, el apartamento lo pagas igual. A Olimpia te la puedes llevar a un motel barato, ya la tienes bien enganchado. Te juro que no te vuelvo a pedir nada más.
--Me has dicho esto tantas veces.
David lo suplica.
--Ahora es verdad, estoy enamorado de Rachid, quiere ser feliz a su lado. Estoy dispuesto a lo que sea por él. Por favor, ayúdame.
Rachid está muy emocionado por la manera en la que lo defiende su novio.

(padres de David)